10 signos tempranos de alerta de cáncer

Según muestra un estudio reciente publicado por Cancer Research UK, 5 de 10 personas ignoran los primeros signos de alerta de cáncer, lo cual evita la detección y el tratamiento temprano, el que podría salvar muchas vidas. La gran mayoría no consulta al médico por no hacerle perder el tiempo, o por temor a ser considerado hipocondríaco. Hay quienes no lo hacen por miedo a que sea cáncer, y esperan que los síntomas desaparezcan por sí solos.

Signos tempranos de alerta de cáncer

El estudio, publicado recientemente en la revista inglesa The Independent y realizado por el Dr. Richard Roope y un equipo médico de Cancer Research UK, fue realizado con 1700 hombres mayores de 50 años. De ellos, más del 50% tuvo uno o más de estos signos tempranos de cáncer y no consultó al médico.

10 señales de advertencia de cáncer

1. Pérdida de peso repentina e inexplicable.
2. Nudos debajo de la piel.
3. Diarrea persistente.
4. La sensación de no poder vaciar el intestino al ir al baño.
5. Estreñimiento periódico.
6. Dolor persistente e inexplicable.
7. Sangre en el vómito, la orina o las heces.
8. Llagas en el cuerpo que no curan.
9. Sangrado fuera del período menstrual.
10. Marcas de nacimiento que crecen, cambian de color o de forma.

Según el doctor Roope, generalmente los síntomas no se relacionan con el cáncer, pero si lo están, el diagnóstico rápido aumenta las posibilidades de cura. Ante cualquiera de estos signos de alerta, es imprescindible consultar al médico de inmediato, aconseja.

¿Qué relación hay entre el azúcar y cáncer?

En una publicación de Cancer Research UK, se analiza detenidamente la relación entre el azúcar y el cáncer, eliminando algunos mitos. Los científicos aclaran que el azúcar no es un factor directo de riesgo de cáncer, pero sí un factor de riesgo indirecto.

La glucosa es el combustible que alimenta a las células. Si comemos un alimento con almidón, como pasta, las enzimas de la saliva y los jugos digestivos lo descomponen y convierten en glucosa. Cuando en la dieta no hay carbohidratos, las células pueden convertir la grasa y la proteína en glucosa, pues necesitan sobrevivir.

El cáncer es una enfermedad de las células, las que crecen y se multiplican rápidamente, lo cual requiere mucha energía, es decir, necesitan mucha glucosa, además de otros nutrientes. Aquí es donde nace el mito del azúcar y el cáncer: “Si las células no tienen azúcar, el cáncer no crecerá”. Pero esto es totalmente erróneo, y el problema no es en lo absoluto tan simple. Las células sanas también necesitan glucosa, no solo las células cancerígenas.

No hay evidencia de que una dieta baja en azúcar reduzca el riesgo de cáncer de forma directa. Pero el azúcar es un riesgo de cáncer indirecto, pues es la causa del aumento de peso, el que a su vez es un factor que incrementa el riesgo potencial de cáncer.

Existe evidencia científica sólida que muestra que la obesidad aumenta el riesgo de 13 tipos diferentes de cáncer, y es la segunda causa de cáncer prevenible, después del tabaco.

Consejos para reducir el riesgo de cáncer

Esta revisión muestra que se debe evitar el azúcar agregado, sustituyéndolo por azúcar natural: de las frutas, los almidones, la leche, las legumbres, etc.

Según el informe, una de las formas más fáciles de hacer esto es reducir las bebidas azucaradas, una de las mayores fuentes de azúcar, así como los dulces, las golosinas, los pasteles, galletas, e incluso algunos alimentos que se comercializan como saludables, como los cereales para el desayuno y las comidas preparadas.

El consejo de los investigadores es mejorar la dieta consumiendo estos alimentos naturales que contienen los nutrientes que nuestro cuerpo necesita. Destacan la necesidad de una dieta alta en fibra, pues esto es fundamental para estimular el sistema inmune y también ayuda a prevenir el cáncer de intestino. 

¿Qué hacer ante los signos tempranos de alerta de cáncer?

Según se desprende de este estudio, así como de las recomendaciones del Dr. Richard Roope, ante cualquiera de estos signos tempranos de cáncer es necesario consultar al médico de inmediato.

Roope dice que nunca es una pérdida de tiempo prevenir el cáncer. Diagnosticarlo a tiempo y comenzar un tratamiento rápidamente puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.

Quien atiende estas consultas lo sabe y, por ello, tampoco es una pérdida de tiempo para el médico, pues su trabajo también es analizar los síntomas para descartar algún tipo de cáncer. Los síntomas pueden ser muy variados y muy comunes, como una simple tos. Pero el signo de alerta de cáncer es la persistencia del síntoma.

Cuando la tos no cesa, una herida no cura, cuando la diarrea aparece con regularidad o el intestino no funciona como debería, hay que consultar al médico lo antes posible. Detectar un síntoma persistente lleva tiempo y si este es un síntoma de cáncer, es necesario actuar rápido.

Deja tus comentarios sobre este estudio científico y comparte con tus amigos. Todos deben estar alerta ante estos signos tempranos de cáncer.